Genocidio y manejo de la información
Para los años 90 el país ya vivía en una situación critica. Había escases económica y las condiciones de vida y la violencia cada vez eran peores. Había habido invasiones de los Hutu y Tutsi exiliados en los países vecinos como Uganda y la fricción aumentaba con el paso de los días. En ese entonces existían medios de comunicación los cuales la mayoría pertenecían al gobierno. Un gobierno autoritario que controlaba casi por completo la agenda de los poco medios que había ya que en 1974 se había creado la Oficina L'rwandais d'Information (ORINFOR) bajo la iniciativa del Presidente Habyarimana. Esta oficina sustituyó al Ministerio de Información y su misión era controlar todos los medios de comunicación del gobierno. El director de ORINFOR era el portavoz de la oficina del presidente.
Pero ¿Por qué el gobierno insistía tanto en tener el poder de los medios? La información da poder, los que tienen el poder de manipularla son aquellos que van a tener el control de todo. Un agenda setter decide de lo que se va a hablar e influyen en lo que la política va influir.
Los medios públicos
Radio Ruanda era la principal estación de radio antes del genocidio. Ésta había pertenecido al gobierno desde sus inicios y para principios de los noventa, cinco de los cincuenta periodistas de Radio Ruanda eran Tutsi. Nadie cuestionaba al gobierno. Aunque sus radioescuchas no simpatizaran del todo con ella, el alto nivel de analfabetismo que había en el país hacia de este medio uno de los mas consumidos. Después del ataque del FPR en octubre de 1990, de acuerdo con el International Media Support (IMS), Albert Baudoin Twizeyimana que trabajó en Radio Ruanda en ese momento, afirmó que ésta comenzó propaganda en contra de la FPR. Se les llamaba "el enemigo" al mismo tiempo se insultaba a los demás Tutsi.
Para 1992 después de la legalización de los partidos políticos de la oposición y la nueva ley de prensa de 1991, durante la llamada "Edad de oro de los medios de Ruanda", la oposición política trató de retirar Radio Ruanda del control MRND. El intento falló y cuando la FPR se movilizó políticamente Radio Ruanda estaba en primera fila difundiendo noticias falsas utilizando su poder para movilizar tropas y ciudadanos en contra de los Tutsi.
Durante las negociaciones de los Acuerdos de Arusha, en los cuales se buscaba llegar a un acuerdo entre el gobierno y los Tutsi, los informes tenían que mostrar que la convivencia era imposible y si los periodistas que no obedecían eran presionados para renunciar.
Ferdinand Nehimana, el nuevo director de la ORINFOR decidió que Radio Ruanda iba a ser su arma de lucha denunciando supuestas conspiraciones del ejercito Tutsi para movilizar a los Hutu. Así para marzo de 1922 Radio Ruanda mando un comunicado en el cual aseguraba que el RPF estaba apunto de matar a varios Hutus. Este incidente terminó por incitar a una masacre en la región de Bugesera en donde miles de Tutsi fueron asesinados; el comunicado resulto ser falsa.
Juguen Wilke nos habla de que los medios, cuando no tienen nada que decir, se ponen a inventar. Exactamente eso fue lo que sucedió en este momento. Los medios ya no tenían nada mas que decir para seguir incitando el odio, entonces decidieron inventar. Decir que los Tutsi iban a atacar era una mas de sus historias de ficción para provocar lo que ellos querían. Es ahí cuando las cosas se empiezan a poner peor. Los medios empezaron a ser una plataforma de odio. Ya no nada mas decidían de que se iba a hablar sino que mentían ¿Qué ganaron? Convertirse en observadores y verdugos de lo que estaba apunto de suceder.
La violencia estaba siendo organizada por un grupo de personas. Para protestar sobre todo lo que estaba pasando en Radio Ruanda los trabajadores se pusieron en huelga.
Es ahí cuando Ferdinand Nahimana decide crear una radio independiente la cual se desarrolló bajo una ideología extremista de los miembros de MRND. Radio Televisión Libre des Mille Collines (RTLM).
RTLM en un principio no daba noticias, se encargaba básicamente de hacer chistes y de poner música popular. Su modernismo la hizo popular porque se habían salido de lo formal que tanto Radio Ruanda como Radio Muhabura (estación de la FPR) tenían.
Por su parte la televisión, también perteneciente al gobierno de Ruanda, empezó a transmitir hasta 1992 y ésta se limitaba a tres tardes a la semana y los fines de semana hasta el día que empezó el genocidio. Había tres noticias todas las noches, una en kinyarwanda, una en francés y otra en Inglés. Su impacto era muy limitado, ya que sólo la élite rica tenía televisión en ese momento cosa que perjudicó los ciudadanos ya que según el International Media Support (IMS), Florian Ukizemwabo, un periodista que trabajó allí hasta el genocidio afirmó que el medio era bastante neutral ya que el jefe editorial no toleraba el desequilibrio aunque aclara que había algunos periodistas que insultaron al RPF ya que eran patriotas defensores del país.
En cuanto a la prensa escrita el estado de Ruanda en los años 60, el estado tenía dos publicaciones semanales, "Imvaho" (= la verdad) en Kinyarwanda, y "La Relève" (= refief) en francés y ambos jefes eran considerados como funcionarios públicos. Los periódicos expresaban la opinión oficial del gobierno.
Con la legalización de los partidos políticos de la oposición en 1991, ORINFOR tiene que darle a todos los partidos políticos la igualdad de acceso a Radio Ruanda. A cada partido político se le dan 15 minutos a la semana para presentar su programas. No era mucho, pero contribuyó al aumento del apoyo a la oposición. Para mediados de 1992 Nahimana fue despedido por censurar los discursos.
Aunque los esfuerzos del Ministerio de Información para introducir reformas fueron muchos, éstos siempre fueron boicoteadas por el MRND cuyos miembros ocuparon puestos clave en la ORINFOR. Esta institución presionó a Radio Ruanda para difundir falsa informes y presuntos abusos del FPR e impidió que los grupos de derechos humanos presentaran sus comunicados.
¿Por qué Radio Ruanda seguía queriendo atacar si supuestamente ya se había firmado un acuerdo? Los Tutsi y los Hutu para este entonces ya tenían valores dados, valores que se les habían inculcado desde cientos de años antes “somos diferentes”, decían. Durante el genocidio de Ruanda los medios de comunicación no hicieron mas que violar la ética del periodismo, se dedicaron a romper con todo lo establecido. Los medios dejaron a un lado su papel de informar y los coordinadores se vieron seducidos por utilizar un arma muy fuerte en contra de la sociedad.
Los medios privados
También existieron medios de comunicación privados. Estos pertenecían a las élites de los distintos grupos. El ser privados no mejoró mucho la situación. Los intereses de los dueños plantearon también una agenda setting que poco respeto los derechos humanos.
"Kinyamateka", fue un periódico mensual creado en 1933 por la Iglesia católica, fue primero los medios privados de Rwanda. Este periódico jugó un gran papel importante en la revolución de 1959 ya que en el se expresaron ideas en las cuales se hablaba de que los Hutu debían tener representación política. En la década de 1960, Kinyamateka era el único medio significativos en Ruanda, además de Radio Ruanda.
En 1967, la iglesia creó una segunda publicación, la bi-mensual "Diálogo". Ambos "Kinyamateka" y "Diálogo" estaban protegidos contra el acoso del gobierno porque pertenecían a la iglesia. Pero por lo general después de la independencia, ambos tenían que moderar sus críticas al gobierno o su tratamiento de los Tutsi.
"Kanguka" (Wake Up!) se crea hasta 1988 y era un periódico en kinyarwanda, que fue creado por, Valens Kajeguhakwa, un Tutsi rico y poderoso. Kanguka denunciado los escándalos de corrupción y amenazas a sus periodistas y aficionados.
Es ahí cuando en la historia de Ruanda por fin vemos un balance. Kanguka viene a poner un poco de orden y aunque tal vez no como se debería, viene a cumplir un poco mas con las éticas del periodismo, a denunciar lo que estaba pasando en su país.
Como respuesta al periódico Tutsi, se creó "Kangura" (Despertarlo!). Kangura luchó contra los temas debatidos en Kanguka. A partir de ahí, este medio jugó un papel importante en el aumento del odio. Poco antes de que el genocidio estallara en 1993 Kangura se convirtió en el primer medio que insultaba constantemente a los Tutsi y a aquellos Hutu que los acusaban de incitar una división. Su propósito se centro en movilizar a la gente de alrededor del presidente para crear una ideología étnica que excluyera a los Tutsi. Su odio hacia esta etnia era tan grande que en el se escribieron los 10 mandamientos Hutu los cuales eran una completa humillación y discriminación al grupo Tutsi. Kangura, en sus publicaciones, anunciaba a la gente que ellos consideraba traidores y enemigos que trabajaban para la RPF lo que hacia que el gobierno persiguiera a la gente denunciada por este periódico.
También existieron medios de comunicación privados. Estos pertenecían a las élites de los distintos grupos. El ser privados no mejoró mucho la situación. Los intereses de los dueños plantearon también una agenda setting que poco respeto los derechos humanos.
"Kinyamateka", fue un periódico mensual creado en 1933 por la Iglesia católica, fue primero los medios privados de Rwanda. Este periódico jugó un gran papel importante en la revolución de 1959 ya que en el se expresaron ideas en las cuales se hablaba de que los Hutu debían tener representación política. En la década de 1960, Kinyamateka era el único medio significativos en Ruanda, además de Radio Ruanda.
En 1967, la iglesia creó una segunda publicación, la bi-mensual "Diálogo". Ambos "Kinyamateka" y "Diálogo" estaban protegidos contra el acoso del gobierno porque pertenecían a la iglesia. Pero por lo general después de la independencia, ambos tenían que moderar sus críticas al gobierno o su tratamiento de los Tutsi.
"Kanguka" (Wake Up!) se crea hasta 1988 y era un periódico en kinyarwanda, que fue creado por, Valens Kajeguhakwa, un Tutsi rico y poderoso. Kanguka denunciado los escándalos de corrupción y amenazas a sus periodistas y aficionados.
Es ahí cuando en la historia de Ruanda por fin vemos un balance. Kanguka viene a poner un poco de orden y aunque tal vez no como se debería, viene a cumplir un poco mas con las éticas del periodismo, a denunciar lo que estaba pasando en su país.
Como respuesta al periódico Tutsi, se creó "Kangura" (Despertarlo!). Kangura luchó contra los temas debatidos en Kanguka. A partir de ahí, este medio jugó un papel importante en el aumento del odio. Poco antes de que el genocidio estallara en 1993 Kangura se convirtió en el primer medio que insultaba constantemente a los Tutsi y a aquellos Hutu que los acusaban de incitar una división. Su propósito se centro en movilizar a la gente de alrededor del presidente para crear una ideología étnica que excluyera a los Tutsi. Su odio hacia esta etnia era tan grande que en el se escribieron los 10 mandamientos Hutu los cuales eran una completa humillación y discriminación al grupo Tutsi. Kangura, en sus publicaciones, anunciaba a la gente que ellos consideraba traidores y enemigos que trabajaban para la RPF lo que hacia que el gobierno persiguiera a la gente denunciada por este periódico.
El genocidio
En 1994 el presidente de Burundi Melchior Ndadaye y el presidente de Hutu, Juvenal Habyarimanapartido, fueron asesinados lo que desató la lucha entre Hutu Y Tutsi ya que se decía que la RPF había sido la causante del incidente. En ese momento miles de personas se vieron obligadas a desplazarse hacia campos de refugiados situados en la frontera con los países vecinos, en especial el Zaire (hoy República Democrática del Congo). Fue ahí también cuando la programación de RTLM cambió. Ahora se dedicaba a incitar el odio a los Tutsi. Criticaba el acuerdo de Arusha y decía que los RPF eran peligrosos así como los Tutsi en general. Cuando el avión calló la RTLM fue la primera en anunciar lo ocurrido y dijo que la RPF estaba detrás de todo con la ayuda de los Belgas. Cuando se desató la lucha la RTLM transmitía las 24 horas del día. La RTLM se convirtió en otro medio en el cual constantemente se hacían denuncias a miembros y personas que podrían ser consideradas amenazas para el gobiernos, cómplices de RPF o traidores. También acusaban a los lideres de sociedades civiles, periodistas que reportaban lo que estaba pasando o que apoyaban los acuerdos de Arusha o actividades de los derechos humanos.
Por su parte, muchos medios independientes empezaron a darse cuenta del abuso de violencia pero tratar de sacarlo a la luz significaba volverse blanco de la “nueva estación de radio” y quien fuera denunciado por ellos corría el riesgo de ser atacado. Hablaba de linchar y matar a los Tutsi porque si no lo hacían ellos matarían a todos los Hutu. Describían a los Tutsis como “Diablos que no pueden controlar su impulso a matar”. Además de incitar al genocidio la RTLM ayudaba a matar; la estación ayudaba a los grupos paramilitares a encontrar gente que supuestamente debía ser eliminada. Por ejemplo daban direcciones y números de placas de personas que trataban de esconderse o de escapar.
La RTLM también perseguía a los padres que trataban de esconder a la gente en iglesias o conventos. Algunas de las grandes masacres se dieron ahí. Durante el genocidio muchos ayudaron gente que iba a ser asesinada y otros ayudaron a buscar y matar.
Y así, en mi opinión, ambos medios se convirtieron en los verdugos mas injustos. En esos que deciden sin saber y que lo único que los movía era el odio y el poder. En la cual el espectador no se convierte en nada mas que en un títere. En este caso un títere de nada mas y nada menos que del gobierno, órgano que tenia el control de la información.
Durante los primeros días del genocidio el Ministro de la Información fue asesinado y el director de la ORINFOR se fue del país, ambos habían tratado de introducir reformas en Radio Ruanda. Fueron remplazados por un Hutu extremista y un periodista que había trabajado en RTLM. Los periodistas que trabajaban ahí fueron matados o corridos y se contrataron nuevos que estuvieran de acuerdo con el gobierno extremista. Se convirtió en el vocero del gobierno que leía comunicados de la fuerza militar. Según Albert Baudoin Twizeyimana, quien dejó Radio Ruanda al inicio del genocidio, incitaban a la gente a quedarse en casa o matar. Poco después se convirtió en una plataforma del grupo extremista que incitaba al genocidio.
La RTLM violo muchos artículos de la Press Law y el Código penal al incitar al odio étnico, crear conflicto y violencia entre la gente y no respetar los principios básicos de la ética del periodismo.
Es verdad que no toda la culpa la tuvieron los medios pero gran parte del odio colectivo que se creó en este espantoso incidente se debió a ellos. Al mal uso de la información y a el abuso de poder que ésta les dio. Es un perfecto ejemplo de lo que dice Jugen Wilke “los actores políticos usan los medios para ajustarlos a sus fines”.
En 1994 el presidente de Burundi Melchior Ndadaye y el presidente de Hutu, Juvenal Habyarimanapartido, fueron asesinados lo que desató la lucha entre Hutu Y Tutsi ya que se decía que la RPF había sido la causante del incidente. En ese momento miles de personas se vieron obligadas a desplazarse hacia campos de refugiados situados en la frontera con los países vecinos, en especial el Zaire (hoy República Democrática del Congo). Fue ahí también cuando la programación de RTLM cambió. Ahora se dedicaba a incitar el odio a los Tutsi. Criticaba el acuerdo de Arusha y decía que los RPF eran peligrosos así como los Tutsi en general. Cuando el avión calló la RTLM fue la primera en anunciar lo ocurrido y dijo que la RPF estaba detrás de todo con la ayuda de los Belgas. Cuando se desató la lucha la RTLM transmitía las 24 horas del día. La RTLM se convirtió en otro medio en el cual constantemente se hacían denuncias a miembros y personas que podrían ser consideradas amenazas para el gobiernos, cómplices de RPF o traidores. También acusaban a los lideres de sociedades civiles, periodistas que reportaban lo que estaba pasando o que apoyaban los acuerdos de Arusha o actividades de los derechos humanos.
Por su parte, muchos medios independientes empezaron a darse cuenta del abuso de violencia pero tratar de sacarlo a la luz significaba volverse blanco de la “nueva estación de radio” y quien fuera denunciado por ellos corría el riesgo de ser atacado. Hablaba de linchar y matar a los Tutsi porque si no lo hacían ellos matarían a todos los Hutu. Describían a los Tutsis como “Diablos que no pueden controlar su impulso a matar”. Además de incitar al genocidio la RTLM ayudaba a matar; la estación ayudaba a los grupos paramilitares a encontrar gente que supuestamente debía ser eliminada. Por ejemplo daban direcciones y números de placas de personas que trataban de esconderse o de escapar.
La RTLM también perseguía a los padres que trataban de esconder a la gente en iglesias o conventos. Algunas de las grandes masacres se dieron ahí. Durante el genocidio muchos ayudaron gente que iba a ser asesinada y otros ayudaron a buscar y matar.
Y así, en mi opinión, ambos medios se convirtieron en los verdugos mas injustos. En esos que deciden sin saber y que lo único que los movía era el odio y el poder. En la cual el espectador no se convierte en nada mas que en un títere. En este caso un títere de nada mas y nada menos que del gobierno, órgano que tenia el control de la información.
Durante los primeros días del genocidio el Ministro de la Información fue asesinado y el director de la ORINFOR se fue del país, ambos habían tratado de introducir reformas en Radio Ruanda. Fueron remplazados por un Hutu extremista y un periodista que había trabajado en RTLM. Los periodistas que trabajaban ahí fueron matados o corridos y se contrataron nuevos que estuvieran de acuerdo con el gobierno extremista. Se convirtió en el vocero del gobierno que leía comunicados de la fuerza militar. Según Albert Baudoin Twizeyimana, quien dejó Radio Ruanda al inicio del genocidio, incitaban a la gente a quedarse en casa o matar. Poco después se convirtió en una plataforma del grupo extremista que incitaba al genocidio.
La RTLM violo muchos artículos de la Press Law y el Código penal al incitar al odio étnico, crear conflicto y violencia entre la gente y no respetar los principios básicos de la ética del periodismo.
Es verdad que no toda la culpa la tuvieron los medios pero gran parte del odio colectivo que se creó en este espantoso incidente se debió a ellos. Al mal uso de la información y a el abuso de poder que ésta les dio. Es un perfecto ejemplo de lo que dice Jugen Wilke “los actores políticos usan los medios para ajustarlos a sus fines”.